me encantó la ubicación, pero el ruido de los bares justo abajo no me dejó dormir, sería un lujo que al menos me ofrecieran otra habitación. la ducha floja y el lavabo en una esquina tampoco ayudaron, casi estoy por casi escribir una buena opinión, pero simplemente no pude.

céntrica y perfecta para pasear por la ciudad vieja

Mi estancia fue fantástica, ya que estaba a pocos pasos de la playa de La Concha y del encantador casco viejo, donde puedes disfrutar de los mejores pintxos de la ciudad. el lugar era muy limpio, cuidado y el trato de los anfitriones era excepcional.

Directo al grano, sin tonterías

Pensión acogedora con un ambiente familiar. La habitación es pequeña y el baño también, pero todo está limpio. Buen detalle dejar un mapa y recomendaciones. El ruido exterior puede ser un inconveniente por la ubicación, y las almohadas son algo incómodas. A pesar de estos detalles, volvería, ya que el carácter del lugar es muy agradable.

La ubicación es excelente y está cerca de todo.

El ruido por las noches es insoportable. Con los bares justo debajo, parece que están en nuestra habitación. Además, el parking es un verdadero caos y el precio es desorbitado. Tuvimos una mala noche gracias a una alarma que no paraba de sonar. Y para colmo, las instalaciones dejan mucho que desear, la ducha no funcionaba bien y el baño era ridículamente pequeño.

El personal es increíblemente amable. pedirle recomendaciones sobre los mejores pintxos fue muy útil para disfrutar aún más de la experiencia.

La ubicación es inmejorable, con todo a un paso y un ambiente vibrante. La limpieza y confort en la habitación fueron destacados, además de contar con un buen desayuno en un bar cercano. Sin embargo, el tamaño de la habitación era muy reducido y el ruido de los bares cercanos puede resultar molesto por la noche. El aparcamiento cercano es caro y complicado, lo que es un inconveniente para quienes llegan en coche.

La pensión está fenomenal, limpia y cuidada al detalle. La habitación interior, aunque un poco oscura, estaba bien equipada. La ubicación es ideal para disfrutar del encanto de la zona antigua y explorar los mejores pintxos de la ciudad.

El suplemento por llegar tarde no es lo ideal.

Qué aventura culinaria! Estar tan cerca de sitios como La Cuchara de San Telmo y Bar Nestor hizo que cada día se conviertiera en un festín. La calidad de los pintxos, lo frescos y sabrosos que estaban, hizo vibrar mis papilas. Además, la habitación era confortable, perfecta para relajarse después de un día lleno de sabor y exploración. Sin olvidar que Beatriz fue un encanto, haciéndonos sentir como en casa.

Aunque el desayuno incluía un café y un croissant, nos quedamos con ganas de mucho más. ¡Así que prepárense para un extra si quieren saciarse antes de un día de pintxos! El aparcamiento también fue un pequeño quebradero de cabeza, pero eso es San Sebastián. Aún así, ninguna de estas cosas arruinó nuestra experiencia.

La Pensión Koxka es un lugar acogedor con una ubicación envidiable en el corazón del casco antiguo. Las habitaciones, aunque algo pequeñas, estaban bien equipadas y con amenidades necesarias. Beatriz, la dueña, fue increíblemente amable y nos proporcionó un mapa con recomendaciones locales. El único inconveniente fue el sonido de la calle durante la noche, que puede interrumpir el descanso.

Fui con un grupo de amigos y la ubicación es perfecta, a pasos de la playa y del casco viejo. Las habitaciones son cómodas y limpias, lo que nos permitió descansar bien después de disfrutar de pintxos por la zona. El personal fue super amable y nos dio buenas recomendaciones para explorar la ciudad.

El único inconveniente fue el suplemento de 20€ por llegar 15 minutos tarde al check-in, aunque avisaron por correo. Fue un poco frustrante, ya que llegamos empapados por la lluvia y tratamos de hacer el proceso rápido.

Ubicación excelente, a pasos de todo. Limpieza impecable y trato de la anfitriona muy amable. La habitación era un poquito pequeña, pero ideal para descansar tras pasear por la ciudad. Perfecta para disfrutar del encanto de la zona antigua.

Las habitaciones están limpias y decoradas con un estilo moderno, ofreciendo todo lo esencial. Además, el detalle de proporcionar un mapa con recomendaciones locales es un buen toque para los visitantes.

El ruido por la noche puede ser un problema si llegan a descansar. la habitación interior puede resultar un poco calurosa en junio. Además, el lavabo estar fuera del baño puede ser algo incómodo al principio, aunque resulta práctico. El suplemento de 20€ por llegar un poco tarde al check-in sin opción de entendimiento también es un detalle a considerar.

Todo bien, cumple su propósito. A pasos de los mejores pintxos y con un ambiente encantador.

La habitación era acogedora, muy limpia y con un encantador balcón que daba a la calle. La ubicación en el corazón del casco antiguo facilitó explorar los mejores pintxos y disfrutar de la animada atmósfera local.

Sería ideal contar con un ventilador más potente.